Los anticuerpos monoclonales se han convertido en una nueva esperanza en la lucha contra la COVID-19. Estos fármacos biológicos, aprobados por la Agencia Europea del Medicamento, se suman a las vacunas y los antivirales como herramientas terapéuticas clave para enfrentar la pandemia.
¿Qué son los anticuerpos monoclonales?
- Los anticuerpos monoclonales son proteínas del sistema inmunitario diseñadas en laboratorio.
- Se dirigen específicamente a la proteína S del SARS-CoV-2, el virus responsable de la COVID-19.
- Al unirse a esta proteína, los anticuerpos impiden que el virus ingrese a las células y se multiplique.
¿Cómo funcionan?
- Se administran por vía intravenosa.
- Reconocen y se unen a la proteína S con alta afinidad.
- Actúan como una inmunoterapia pasiva, activando la respuesta inmunitaria desde fuera.
Estos anticuerpos no previenen la infección, pero son útiles para tratar pacientes inmunodeprimidos o con riesgo de infección grave. Además de la COVID-19, también se investiga su uso en otras enfermedades autoinmunes. La ciencia española está contribuyendo significativamente en esta área